Leyendas de la Alhambra.

En cada de nosotros hay algo romántico y poético, todos tenemos un gran sentimiento por lo misterioso y fantástico, por las narraciones en las cuales la verdad y la fantasía están inseparablemente unidas. Por eso me parece lógico contar algúnas leyendas, baladas, historias ciertas o fabulosas de amor, de guerra y de lugares conocidos y enigmaticos.
Quiero empezar estas narraciones por algunas leyendas de un lugar bonitísimo que acabo de visitar (y conocer, porque nunca lo he visto antes) y que a mí me encanta. Pero primero hay que decir unas cuantas palabras sobre lo que son las leyendas en general.
Leyenda es una narración con los elementos imaginativos y con algo misterioso pero que quiere parecerse a la verdad y que tiene una conección con algo que existe realmente. La palabra viene del latín legenda («lo que debe ser leído»), y aunque ahora leyendas pueden ser escritos o no lo ser, en origen, una narración debe ser escrita y leída en voz alta en público. Siempre he pensado en España como un país lleno de leyendas, porque aquí se mezclaron tradiciones de diferentes gentes: célticas, ibéricas, romanas, visigodas, judías, árabes; y sigo pensar así.
Entonces, a mí me gustaría contar unas cuantas leyendas de la Alhambra, palacio oriental situado en Granada en el que ejercían su dominio los monarcas moros, y que continuó siendo patrimonio real y habitada por algunos monarcas castellanos, cuando el reino pasó a manos cristianas.
Elena y yo estuvimos en Granada el fin de semana pasado y a mí me gustó muchísimo la ciudad y la Alhambra aunque llovía todo el tiempo durante nuestra estancia en Granada.

Primero hay que contar la leyenda del nombre "Alhambra".
Este nombre procede de una palabra musulmana ("Qal'at al-hamra") que significa "Fortaleza Roja". Pero es cierto que al aparecer la Alhambra era blanca. Por eso aparece la pregunta: ¿por qué se conoce como castillo rojo?
Según la leyenda muchos obreros intervenían, y el color rojo provenía de sus hachas brillando al sol. Y, además, dice que por la noche se encendían fogatas para ver los resultados de trabajo de construcción, y esto daba un aspecto rojizo para los que la observaran desde la Vega de Granada.

La leyenda del nombre de sala de las Dos Hermanas dice que el nombre viene como el recuerdo de las bellas moras que en otro tiempo adornaron con su presencia esta sala que formó parte de harén real.
Aunque hay otra versión menos poética: el nombre procede de los grandes losas de alabastro a uno y otro lado del suelo.

Otra leyenda bonita es la de La puerta de Justicia.
La leyenda dice que por la razón de magnificencia de la entrada ningún caballero a caballo con su pica podría tocar la mano gravada en lo alto del arco exterior. Tan seguros estaban de ello,que aseguraban que quien lo consiguiese conquistaría el trono de la Alhambra.

Según la leyenda de La Torre de las Infantas tres princesas musulmanas estuvieron encerradas en la Torre por su padre, rey de Granada. Él les permitía pasear sólo de noche por las colinas y prohibía que alguien les saliera alencuentro bajo pena de muerte. Aunque la leyenda dice que se las solía ver de vez en cuando aunque fuera por la noche paseando, pero desaparecieron apenas les derigió alguien la palabra.

La Alhambra está llena de leyendas como estas y por eso para los viajeros con un gran sentimiento por lo historico y lo poético es un lugar obligatorio para visitar. Y valen la pena los esfuerzos que uno, que quiere verla, tiene que aplicar (nosotras fuimos por la mañana (11:45) a la taquilla y llevamos un buen rato bajo la lluvia guardando la cola para entrar a la Alhambra por la tarde(17:30).
Granada y la Alhambra me encantan tanto que he comprado el libro de W. Irving "Cuentos de la Alhambra" y voy a contaros todolo interesante que leeré.